sábado, 11 de diciembre de 2021

Boys and Girls -Tiger Bay- 2-

 



 

 
 
Bronic encuentra a Anya en su nuevo piso, la abraza entusiasmado por reencontrarla, pero nota una gran frialdad en ella  pero ella. Observa que tiene la mesa dispuesta para recibir a otra persona, y además tiene un aparato de televisión. Bronic empieza a sospechar algo extraño. Y es que mientras él se hallaba en el mar, ha estado saliendo con otro hombre, un comentarista deportivo casado llamado Barclay-Anthony Dawson.



 
 
 
 
 
 

 
Gillie Evans es una marimacho huérfana que vive con su tía Mrs Phillips. El rostro angelical de Gillie oculta el hecho de que es una mentirosa tan compulsiva como habitual. Su mayor deseo en aquel momento es hacerse con una pistola de juguete para poder jugar a "indios y vaqueros" con los chicos de su vecindario.

 
 

Su tía plancha ropa para los vecinos y encarga a Gillie que entregue el pedido. En la escalera se oye a Bronic y Anya discutir en polaco, pero Gillie no presta atención. La niña, con su habitual carácter juguetón, ha comprado con las sobras del dinero de la compra que, mintiendo, no devuelve a su tía,  una pequeña bomba petardo, y cuando la vecina le indica que pagarán el planchado al día siguiente, Gillie, jocosamente, expresa que lo duda, y mientras el marido, sr. Williams, se afeita hace explotar el petardo provocando un corte en la mejilla al vecino. Luego sale corriendo entre risas.







Finalmente, la vecina a deja por imposible. Y ahora, tras la travesura con sus  vecinos, Gillie empieza a interesarse por la discusión que resuena en la escalera.





 
 
 
 
 
 
 

 
 
 
Anya y Bronic discuten, dado que ella no desea volver a reiniciar su relación con él. Le insulta y le grita que vuelva al mar y que ella prefiere volver a un campo de refugiados antes que seguir esperando su regreso. Finalmente, le confiesa que hay otro hombre que la mantiene. Bronic, desesperado por los celos, pega a Anya, y ella se defiende con una pistola, pero él logra arrebatársela y le dispara causándole la muerte. Gillie que ha estado oyendo la pelea entre ambos, será testigo del incidente a través del buzón de la puerta del apartamento. Tras el susto, se le cae la bomba por el hueco de la escalera. Bronic sale del apartamento y Gillie se escabuye escaleras abajo
 
 


 
 
 
 
 


 
 
 
 
 
 

El bang de la bomba amortigua el tiro de la pistola que lleva consigo Bronic. Su vecino, el sr. Williams, policía, sube para reñir a Gillie, y le quita los fulminantes amenazándola de que ya está harto de sus gracias: "Quedan confiscados, una más y vas a ir a parar a la cárcel". Gillie se esconde en un descansillo oculto de la escalera, y cuando Bronic esconde el arma cerca de ella, la niña la toma. y Bronic, que la ha visto, se va a enfrentar a ella, pero en aquel momento Barclay  llega a visitar a Anya. Y al encontrarla muerta, huye de allí. Luego Gillie corre a su apartamento, donde esconde el arma. Bronic se siente perdido y abandona a toda prisa el edificio. 
 
 
 
 
 
 
 



 
 





 
 
Barclay comprueba que la pistola que Anya guardaba en un cajón ha desaparecido. Y luego abandona el apartamento cautelosamente.  
 
 
 
 
 
 
 
 

 
 

Gillie ya en su piso, esconde la pistola de Bronic. Luego explica a su tía que no le han pagado y que el sr. Williams le ha quitado los fulminantes.
 

 
 
Suena el teléfono de la escalera. Alguien que pregunta por Anya, y la portera acude al apartamento de la joven, encontrándola muerta. Toda la escalera acude a las exclamaciones de la portera que informa a los vecinos de que Anya ha sido asesinada. Será un vecino del edificio, el agente Williams, quien traiga  a la policía.
 
 
 
 
 
 
 


 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

Queriendo quedarse con el arma, Gillie le miente al superintendente de policía Graham-John Mills, y al agente Williams-Meredith Edwards, un residente del barrio que conoce bien a la traviesa y mentirosa Gillie, sobre lo que al parecer pudo haber presenciado El agente Williams muestra la bomba de Gillie y explica que produce un sonido igual al de un disparo de revólver. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

 
 

 
 
 

Cuando es interrogada por Graham, la niña tan sólo se vale de respuestas inconexas y evasivas sobre el tema y el teniente Graham y el agente Williams intuyen que la pequeña en realidad oculta alguna información importante. Cuando la policía se marcha, Gillie toma la pistola escondida y sale de casa con ella sin que su tía se dé cuenta. Su tía la peina, tiene que acudir a cantar en el coro de una boda. Y mientras  sale corriendo extraen el cuerpo de Anya del edificio.